Manejo Dolor e inflamación
El dolor asociado a estas patologías orales es de tipo agudo o crónico, teniendo intensidades de leves a severas. Así entonces, se debe planificar un protocolo anestésico y analgésico acorde a la enfermedad y sus signos.
Debemos considerar también, los procedimientos que se realizan para diagnosticar y tratar dichas patologías como causantes también de dolor (biopsias, destartrajes, extracciones dentales, extracción de masas, mandibulectomias, etc).
Queda claro entonces, que el tratamiento del dolor, requiere un manejo individual para cubrir las necesidades del paciente, lo que también se aplica al estímulo doloroso del propio procedimiento que se realizará, clasificando entonces la magnitud del dolor para administrar una mayor analgesia en procedimientos que así lo requieran.
Para esto, la combinación de drogas anestésicas y anlagésicas de efectos generales , gas anestésico y drogas anestésicas de uso local, permiten un resultado sinérgico, para un adecuado manejo del paciente y su patología.
El buen uso de todas estas drogas permite:
- Una Anestesia ligera o más superficial en procedimientos simples o cortos
- Una adecuada analgesia más estable en procedimientos traumáticos o de moderada a larga duración.
- El uso de menores dosis de drogas anestésicas y analgésicas generales.
- Tener menores efectos sistémicos y un mejor efecto local.